El Arte de la Construcción

Construir no es un trabajo sencillo. No es algo que se logra de un día para otro. Los tiempos de la política, los medios, los propios y los ajenos a veces conspiran contra la construcción. 

Hay quienes trabajan instalando dudas, hay quienes trabajan silenciosamente, otros que asumen el lugar que les toca y otras que diagraman los pasos a seguir a pesar de los resultados. 

Todos estos factores hacen que la construcción, en política, sea una tarea sólo apta para quienes pueden y quieren esperar. 

La inmediatez del meme, el sticker y la burla son propios del clima electoral, del debate digital, del micro clima que sólo sabe vivir de las victorias del momento. 

Los grandes análisis muchas veces están contaminados de las ideologías propias de quienes escriben, pese a que la idea de la divulgación de estos conceptos quieran inducir a libertad de pensamiento. 

Los triunfos también se construyen con la falla en el diagnóstico de los oponentes – pese a que a muchos les cueste reconocerlo un martes por la tarde.  Ese lugar también fue habitado y sobrevuela la cita de Emanuel Ginóbili “tuve más fracasos que triunfos” y otro bahiense, Agustín Aristarán #SoyRada, responde “cada fracaso hizo la próxima victoria” 

Vieron que también puede meter citas pochocleras locales 🙂

“Entre el 2013 y el 2015 el PRO abrió una caja de pandora judicial y de persecución que terminó creando a un personaje como Javier Milei” explica el politólogo Franco Beverini en #ApepeRadio. 

Bahía Blanca no fue ajena a esta realidad y muchas personas inclusive aquellas que mueven los hilos de la política, el poder, la justicia y los medios creyeron que el Peronismo no podía volver a ganar en la ciudad.

La decisión política de Juntos Por El Cambio luego del segundo triunfo de Héctor Gay en 2019 de cancelar la discusión política-institucional en el ámbito local también es un factor a analizar dentro de este triunfo de Federico Susbielles. La estructura de alianzas partidarias de JXC se vieron reprimidas a la hora de hacer gestión. Unos pocos supieron saltar el cerco y encontrar su lugar pero quedó al descubierto la desarticulación.

Volvamos para atrás. 

De los memes del estilo “los bahienses no me entienden” a reconocer la derrota hay sólo cuatro años de diferencia. La construcción del peronismo con la conducción de Federico Susbielles compitió en el 2017 con Carlos Quiroga como candidato a Concejal y la conformación de un bloque deliberativo con Gisel Ghigliani y Walter Larrea en una ciudad que vibraba, soñaba y extasiaba en color amarillo. 

En el peronismo nunca faltan las disidencias y en la construcción siempre aparecen hombres y mujeres que quieren disputar el poder. Algunos con herramientas válidas y otros con artes oscuras. En el camino de las derrotas el susbielismo también logró superar y dejar atrás algunos de esos tragos amargos. 

No se puede obviar tampoco que desde hace seis años un grupo de personas que, lamentablemente, la Justicia Federal todavía no logra identificar persiguió, fastidió, intimidó y culminó poniendo una bomba en el local de una organización política. Tal vez, como “muchos” creen, la ciudad no tenga un ADN peronista aunque ha quedado claro una vez más que no tiene ADN antidemocrático. 

El camino al triunfo fue largo, marcado por numerosas negociaciones, por la disputa interna dentro de la CGT que finalmente logró una unificación, por la disputa de nombres y apellidos en el PJ local, por la aceptación de hombres y mujeres del pasado inmediato naranja y por la convivencia de varias organizaciones políticas de juventudes que coexistieron dentro de la campaña. 

Ganar dura un instante. 

El desafío que tiene la conducción de Susbielles por delante es el que vimos esta mañana, el de comenzar una transición sencilla, concreta y sin perder el tiempo. Tal es así que quiere asumir el domingo y ya se lo trasladó a Gay.

En 48 horas el próximo intendente puso nombres en los puestos claves del nuevo gobierno, en los que la ciudadanía le reclamó presencia a la gestión actual y en los que él hasta el domingo hizo pie y parte de su campaña. 

Susbielles ya adelantó que en Economía estará Carlos De Vadillo, en Comunicación Virgina Pascual y en Seguridad Federico Monteros. 

La foto del saliente y el que viene se comenzó a gestar el domingo por la noche. Antes del tuit de Gay, Susbielles recibió dos llamadas breves, pero concretas.

Mientras bajaba la espuma de los festejos – ya eran las dos de la mañana – los integrantes del núcleo comenzaban a trabajar en la transición. Vía mensajes de whatsapp, ya con la madrugada a cuestas, los integrantes del gobierno saliente empezaron a trazar las líneas de trabajo, con quienes eran sus oponentes, para poner nombres y apellidos en la transición hacía el susbielismo. A veces las ficción del periodismo se esfuma en un par de tipeos y vuelve a haber política. Es difícil pensar que quienes juegan juntos al fútbol, quienes ejercen la misma profesión o compartieron espacios en común no puedan conversar y ponerse a trabajar. Sólo ocurre en la cabeza de quienes copian, pegan y repiten.

Moraleja: es más fácil hacer política hablando que tuiteando y aplica para todos y todas. 

Se brega además desde este humilde espacio para que los temas de la ciudad se vuelvan a discutir en los ámbitos institucionales que la democracia nos dió. 

La mesura que fuera cuestionada en elecciones anteriores por triunfadores que hoy no pudieron repetir esa suerte, será la misma que se mantendrá ahora desde estos renglones. 

El PRO puro empieza a trasnsitar un camino de reconstrucción que lamentablemente será trazado por las decisiones unipersonales de Mauricio Macri, las cuales afectarán acuerdos. 

En nuestro medio ya se expresaron el presidente de la Coalición Cívica y la concejala radical Gisela Caputo quienes fueron claros con respecto a Javier Milei. Desde la Juventud del PRO también salieron a buscar padres de la derrota y encontraron en Emiliano Alvarez Porte una respuesta. Esto sugiere la siguiente pregunta ¿Con la derrota tan fresca es un escenario ideal comenzar a particionar un bloque de concejales que todavía conserva la mayoría? 

Con la salida de Héctor Gay, el PRO y de continuar con su alianza, Juntos Por El Cambio tendrá en Fernando Compagnoni, Adrián Jouglard y Tomás Marisco la responsabilidad de volver a construir triunfos. Resta saber si el posicionamiento de la Coalición Cívica en el balotaje afectará el acuerdo de Andrés De Leo quién también quiere ser “constructor”. 

Dato, no opinión. La estrategia de conducción que eligió en esta última elección el espacio amarillo fue el que siempre cuestionó en sus rivales a nivel nacional.

Juega BOKEEEEE, nos vemos mañana en #ApepeRadio.